Los estudios de estabilidad son un requisito obligatorio según el Reglamento (CE) Nº 1223/2009 sobre productos cosméticos, pero su realización no solo responde a requisitos legales, sino que es una inversión para garantizar la calidad y la seguridad del producto a lo largo de su ciclo de vida, lo que genera confianza en el consumidor y refuerza la imagen de la marca.
La ISO 18811 reconoce que, debido a la diversidad de productos cosméticos y las distintas condiciones de almacenamiento, no es posible establecer un único método de evaluación de estabilidad. Por ello, es responsabilidad del fabricante diseñar y justificar el protocolo de estabilidad más adecuado para su producto.
En este enlace puedes leer el artículo de Dr. Goya Análisis, que publica la revista Industria Cosmética:
https://www.industriacosmetica.net/revista/numero-34-2024 Págs. 106-107